Una personita muy especial vino desde muy lejos para conocernos y dejarnos grandes lecciones. Revive esta inolvidable historia mientras pintas cada una de las escenas en detalle.

El arte oriental de los mandalas, con sus conocidas propiedades antiestrés en los adultos, tambien ha demostrado ser una potente herramienta pedagógica para los más pequeños. Observar los detalles de los dibujos favorece la concentración y la atención. Dedicarle el tiempo necesario a cada dibujo permite desarrollar la paciencia y ayuda a encontrar un espacio de relajación. La elección de los colores se convierte en un modo de expresar los sentimientos y en un medio de desarrollo de la creatividad.

Los invitamos a compartir con sus pequeños un momento especial de relajación, que sin duda todos disfrutaran.